Guía para un Home Office Efectivo

Al carecer de supervisión visual, debemos establecer objetivos claros y concretos. Ambas partes deben tener claro día a día, qué se espera de ellos de manera puntual.

La comunicación constante es vital entre los miembros del equipo y así mismo reportar los avances en tiempo y forma para evitar la impresión de que el trabajo remoto no está siendo efectuado. Hoy en día existen plataformas (Project Manager Software) que permiten realizar tareas en equipo y permite la visualización de los avances de las metas diarias.

Trabajar desde casa no implica un menor nivel de profesionalidad, establece horarios tanto para tu jornada de trabajo como para las tareas que tu y tu equipo realizarán durante el día.

Puedes también utilizar un Software de Puntuliadad y Asistencia como 4D Suite, su módulo 4D Fieldwork, permite geolocalizar a tu empleado, adjuntar fotografía y horarios de entrada, salida y descansos, mandando directamente a la prenómina las incidencias desde donde esté.

Otro peligro de trabajar desde casa es no saber cuándo parar, por lo que lo más sano es establecer una hora límite para cumplir con los objetivos del día y respetarlo. Agrega también espacios para comidas y descansos.

Será necesario confiar información y documentación de tu empresa a tus colaboradores estando fuera de ella. En vista de esto, deberás pensar no solo en el colaborador, sino en las otras personas que entran en su casa. Es preciso tener un método para recuperar tal información en caso de que la la relación laboral termine, así como acciones específicas en caso de cualquier incidencia . Asegúrese de informar sobre ello a sus colaboradores.

Muchas empresas utilizan software para dar seguimiento a las acciones de los colaboradores, pero si esto no es idóneo para tu tipo de empleo, es preciso garantizar que todos estén trabajando en niveles óptimos.

Debes establecer y comunicar con cuánta frecuencia te comunicarás con ellos, incluso si es solamente por correo electrónico.